¡NECESITO FUERZAS PARA SEGUIR ADELANTE!
Psicología/Desarrollo Personal
Hay ocasiones en la vida en las que nos sentimos estancados.
Puede tratarse de un proyecto creativo en el que estamos trabajando, una
relación de pareja que ya no funciona, unas deudas que han dejado de tener
sentido o incluso podemos sentirnos estancados en nuestro Desarrollo
Personal.
La emoción inicial que nos inspiraba ha desaparecido. Su
lugar ha sido ocupado por la confusión, el abatimiento y el desgano. Nos
sentimos abrumados y atrapados, una sensación terrible que genera a su vez
angustia, inseguridad, agobio y desesperanza. ¿Qué hacer en esos casos?
¿Cómo encontrar la fuerza que necesitas para seguir
adelante?
1. Da un paso atrás
Puede parecer un contrasentido, pero cuando necesitas fuerza
para seguir adelante a veces hay que dar un paso atrás. Al asumir una distancia
psicológica de la situación podemos aplicar la máxima de Einstein: "Ningún
problema se puede resolver desde el mismo nivel de conciencia que lo creó".
La idea es que generes un nivel de pensamiento diferente que
te permita evaluar tu situación actual desde otro punto de vista, a ser posible
desapegado, que te ayude a ver las cosas en perspectiva y con más objetividad.
Esta técnica de visualización te ayudará a
comprender la importancia de dar un paso atrás: “Imagina que estás perdido
en el bosque. Podrías seguir avanzando, buscando la salida. Podrías entrar en
pánico y caminar en círculos. Podrías regresar por donde viniste. También
podrías simplemente quedarte donde estás con la esperanza de que llegue pronto
la ayuda.
Imagina, en cambio, que puedes detenerte, respirar
profundamente y alejarte de tu situación. Imagina que puedes volar por encima
de todo como si estuvieras en un helicóptero y mirarte a ti mismo entre los
árboles. ¿Qué verías al cambiar la perspectiva? Una ruta diferente que antes no
podías divisar”.
Otra forma para "alejarte" consiste en analizar la
situación en que te encuentras como si fueras un observador neutral. Imagina
que eres otra persona. ¿Qué ideas o consejos te darías a ti mismo?
2. Sé específico
Es difícil avanzar si no entiendas por qué estás atascado.
Si intentas seguir, es probable que des palos de ciego y te hagas daño. La
clave radica en ser específico e identificar qué está sucediendo realmente.
Debes poner en palabras lo que ocurre, para poder comprenderlo y superarlo.
Después de todo, un problema bien definido puede contener su propia
solución.
Si quieres encontrar un camino, el primer paso es entender
cuál es el problema subyacente, lo que te mantiene atrapado. Cuando se
profundiza un poco más en el problema, desafío o bloqueo, las soluciones suelen
aparecer.
Por ejemplo, existe una gran diferencia entre el
pensamiento: “Me siento estancado” y “Me siento estancado porque me abruman
tantos detalles” o “Me siento estancado porque me preocupa lo que los demás
pensarán sobre mí”.
Hazte preguntas como: “¿Qué se interpone en el camino?”
Cuando encuentres una respuesta, sigue preguntándote: “¿Qué más se interpone en
mi camino?” Hasta que llegues al problema real. Ten en cuenta que
generalmente las primeras respuestas no son las más profundas, tendrás que
excavar para hallar la verdadera causa.
Una buena idea consiste en llevar un diario terapéutico. A veces es más fácil escribir los problemas porque asumes una actitud más distante que te permite expresar lo que te preocupa sin tu autocensura.
Una buena idea consiste en llevar un diario terapéutico. A veces es más fácil escribir los problemas porque asumes una actitud más distante que te permite expresar lo que te preocupa sin tu autocensura.
3. Encuentra tu "por qué"
A veces puedes sentirte estancado porque has perdido de
vista el panorama general y, lo que es importante, has olvidado tu “por qué”,
la razón por la cual te involucraste en ese viaje y tomaste esas decisiones. En
muchas ocasiones los grandes proyectos demandan mucho trabajo duro, y es normal
que todas esas tareas y hábitos hagan que pierdas la perspectiva.
En ese caso, es necesario que te recuerdes por qué comenzaste,
qué motivos o pasiones te han llevado hasta ese punto. ¿Cuáles eran los
objetivos que querías alcanzar en tu vida? ¿Por qué quieres lograr eso que te
has propuesto?
Cuando activas tu intención y propósito original, recuperas
la motivación intrínseca para seguir adelante. Conectarte a esa razón más
profunda te mantendrá en movimiento y te permitirá sortear los obstáculos y
afrontar los tiempos difíciles.
Pregúntate: ¿Por qué es esto importante para mí?, ¿Por qué
empecé esto? ¿Qué estoy intentando lograr? Leer estas frases de motivación
para seguir adelante también te ayudará a encontrar la fuerza que
necesitas.
4. Suelta lo que no funciona
¿Alguna vez has caminado por el barro, se te ha atascado la
bota y se te ha salido el pie? Cuando te pasa algo así, generalmente tienes dos
opciones: volver a ponerte la bota y seguir avanzando con dificultad,
repitiendo la frustración mientras te atascas continuamente, o puedes quitarte
la bota y seguir adelante
Lo mismo ocurre en la vida. Cuando nos atascamos, a menudo
preferimos quedarnos con los pies en el barro con tal de no abandonar nuestras
botas. Seguimos repitiendo lo que no funciona. La bota representa esas
creencias limitantes, viejos hábitos o historias que estamos reviviendo.
Por eso, a veces para seguir adelante debemos practicar el
desapego, soltar aquello que se ha convertido en un lastre para poder despegar.
A veces tenemos que deshacernos de nuestro equipaje emocional porque algunas de
las cosas a las que nos apegamos son precisamente las que nos mantienen
atrapados y nos impiden volar.
Debemos recordar que en la vida hay cosas mutuamente
excluyentes. Eso significa que no podemos tenerlo todo, sino que debemos
renunciar a algunas cosas. Pregúntate: ¿Qué te está frenando? ¿Un viejo hábito,
una creencia limitante, una emoción o un pensamiento recurrente negativo? ¿Qué
necesitas para desapegarte?
5. Haz un brainstorming de opciones
A veces puedes sentirte estancado porque no ves ninguna
salida a tu situación actual, sientes que no tienes ninguna opción. Te resulta
imposible ver la luz al final del túnel. En esos casos, al generar ideas y
posibilidades, expandes tu mente y abres tu pensamiento para encontrar una
nueva solución. Cuando logras ver opciones potenciales dejarás de sentirte
atrapado y te sentirás más animado.
Ni siquiera tienes que tomar una decisión, se trata de dejar
que la mente creativa se expanda y vea todas las posibilidades que existen. Es
posible que te hayas sumergido demasiado buscando lo "correcto" y
hayas eliminado todo lo que no te parecía perfecto. Sin embargo, la búsqueda de
la perfección puede generar una cantidad enorme de estrés e incluso crea
una parálisis por análisis.
La realidad es que no hay un único camino. Hay muchas
posibilidades que podrían funcionar para la situación en la que te encuentras,
solo tienes que abrir la mente. Por tanto, haz una lista de todas las
soluciones posibles, aunque te parezcan poco realistas o incluso tontas.
Si no estás contento con tu relación, ¿qué puedes hacer?
Probablemente hay muchas más opciones de las que has considerado. ¿Cuáles son?
Cuanto más deje volar tu imaginación, mejor. Luego, activa la mente racional y
analiza con detenimiento todas esas soluciones. ¿Hay ideas que merece la pena
explorar?
Entonces y solo entonces puedes identificar el camino a seguir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario