El Respeto

EL RESPETO En esta reflexión intentaré escribir sobre de aquello que es tan metafísico pero tan divino a la vez. Esta telaraña de letras se basará en varios hechos, algunos de ellos más graves que otros, pero que todos son dignos de nombrar. Entonces, aquí empezaré a escribir de algo muy sagrado, de algo que aunque no tenga forma, es lo más valioso y menos valorado a causa de una sociedad tan materialista en la que cada egoísta se mira solo su ombligo ¿Ahora sabéis de que trato de escribir? Alma, una vez algo llamado alma, conocida también con el nombre de sentimientos y sensaciones ¿o es que a caso habíais olvidado lo que era? Pues es mejor hacer caso de ello para ser felices. Este conglomerado de sentimientos y sensaciones que se haya dentro de cada ser es lo que realmente nos determina como personas, es algo intocable, intangible, pero sin embargo tiene una fuerza inimaginable, y que podría llegar a mover montañas, pero para que esto suceda, debemos tener presente ante todo el respeto. El respeto, algo también sin forma, es lo que nos enseña a valorar de forma neutral cada una de las cosas o de los hechos, es decir, hay que saber respetarnos a nosotros mismos, y por delante de todo, respetar a cada una de las personas que existen en este mundo. Da la casualidad de que nos encontramos en un mundo materialista movido básicamente por dos cosas: Dinero y Sexo, dos cosas materiales y físicas que se perciben con cada uno de los cinco sentidos, eso hace pues, que cada uno de los elementos de esta sociedad tenga un muro en frente que no le deja ver mas allá de sus propios intereses, lo cual provoca un egoísmo extremadamente acentuado, lo cual a la vez nos lleva a no tener noción del respeto. Respeto es tener en cuenta cada uno de los sentimientos de cada persona, no jugar con ellos e intentar herirlos lo menos posible. Dicho en otras palabras, hay que vivir en esta vida intentando hacer el menor daño posible. Respeto es valorar el esfuerzo que hacen algunos para seguir adelante. Y por delante de todo, respetar es uno de los pasos que nos lleva a la felicidad. Por ejemplo: engañar a alguien haciéndole creer que le puedes solucionar un problema algo que algo de lo que tu no tienes el control, y siendo consciente tu propias limitaciones aprovechándote de lo que siente, es una falta de respeto, un atentado hacia los sentimientos de aquella persona. Creando expectativas que se convertirán en falsas ilusiones. Con este hecho que puede parecer tan absurdo se puede llegar a provocar las mayores desgracias que han sucedido durante siglos, me refiero a lo que son guerras, atentados... Cada uno de ellos, actos para realizar un objetivo material. Como por ejemplo, el reciente atentado en Madrid, ¿creéis que es normal sacrificar vidas inocentes que no tienen culpa alguna de lo que quieran llegar a lograr aquellos que se hacen llamar superiores a los demás? ¿Qué sucede? ¿Que en esta vida no somos felices si no es a base de pisotear a los demás con tal de llegar a la meta más alta? Otra falta de respeto es despreciar lo que a alguien le ha costado un gran esfuerzo conseguir, un padre que no aprueba el trabajo de un hijo solo porque no es lo que él quería o un amigo que no aprecia la afición de otro solo porque no lo entiende o no le gusta. Si alguien hace un gran esfuerzo en algo hay que saber apreciarlo, aunque no lo entendamos, porque uno se esfuerza por aquello que le gusta y le apasiona, y despreciarlo resulta ser una grave falta de respeto. Respeto a fin de cuentas es tener en cuenta los sentimientos y sensaciones de los demás y no despreciarlos ni desmerecerlos, porque al hacerlo perdemos también el respeto por nosotros mismos. Oct-07 Dt.